Los responsables de la edición digital del diario Le Monde han decidido lanzar Le Post, una especie de medio de experimentación en el que ir probando arriesgados cambios en la manera de concebir y presentar la información.
Me parece una medida muy inteligente gracias a la cuál se pueden correr muchos riesgos que en un medio como Le Monde no se pueden ni pensar como, por ejemplo, informaciones en apenas cuatro líneas completadas por un vídeo de YouTube. ¿Más novedades? Para alguien que no entiende el francés es difícil decir, o, al menos, complicado de asegurar, ya que corro el riesgo de equivocarme. Siguiendo un modelo que me recuerda al de ADN.es, apuestan por la personalización y la implicación de los lectores en las noticias, al punto de tener la opción de concebirlas y presentarlas junto a las de la propia redacción y las agencias. Además, cada usuario puede ir etiquetando y valorando las noticias y relacionándose con el resto de usuarios formando grupos en un intento de configurar su identidad en la red que, reitero, me recuerda al sostenido por Varela cuando vistió de largo a su ADN.
Considero que estamos ante un modo más que correcto de valorar el impacto que pueden tener las nuevas prácticas y servicios que, posteriormente y siempre que su acogida y rendimiento sea el correcto, terminen revirtiendo en el medio del que depende.
Le Monde ha hecho de trailblazer, ¿quién irá detrás?
Vía| E-periodistas